El titular puede parecer redundante cuando estás leyendo esto en un blog de una empresa especializadas en venta de EPIS. Claro, los equipos de protección individual están para prevenir los riesgos laborales. Sin embargo, siempre viene bien recordar la importancia que tienen.
La obligación como trabajador es muy sencilla: tenemos que utilizar los EPI, pero no porque nos obliga el empresario o la ley, si no por nuestra propia seguridad.
Acción - Reacción.
Si se trabaja en una obra y no se tiene el casco puesto puede ocurrir que se caiga algo sobre la cabeza en cuyo caso las probabilidad de sufrir un trastorno cráneo encefálico grave, severo o mortal se multiplican por mil. Con casco, se reduce exponencialmente las probabilidades de fallecimiento y la gravedad de los daños. No usar protectores auditivos cuando en el entorno de trabajo o durante la realización del mismo hay un nivel elevado de ruido, puede derivar en una perdida de audición de media a severa a medio o largo plazo. Taladrar un metal que puede producir chispas sin gafas protectoras puede hacer que salten elementos metálicos al ojo y dañarlo: en el mejor de los casos producirá una úlcera en el globo ocular y de ahí poder llegar hasta la pérdida de la visión o del propio ojo.
Como estos tres ejemplos, podríamos mostrar decenas más. Porque por una vez no pasa nada, por intentar hacerlo más rápido, porque no tenemos tanto tacto... tantas y tantas escusas que muchas veces usamos para justificarnos no hacer las cosas como sabemos que se deben hacer. Es más, hasta en nuestro entorno doméstico nos encontramos con diferentes tareas que pueden generar un riesgo por la utilización de maquinaria o herramientas. por tener que realizarlas en altura o a distinto nivel y ahí también tenemos que prevenir y usar los EPI adecuados cuando sean necesarios.
Un trabajo seguro puede marcar la diferencia entre volver sano y salvo a casa o no. Prevenir (valorar qué trabajo vamos a realizar, cómo lo vamos a hacer y con qué EPI) no sólo es una obligación, si no una necesidad personal. Y dentro de la prevención está el uso de los EPI, como hemos visto. Desde Janfer no nos cansaremos de recordar que los EPI son vitales y, por eso mismo, se tienen que usar siempre que así se haya marcado. Como decimos son V-I-T-A-L-E-S. ¡Úsalos!